¿Tus datos no correlacionan pero insistes en que sí? Los ojos cansados te traicionan y buscas conexiones que no existen, pero algo parecido a tu ley del cierre hace que las cosas encajen y saques conclusiones erróneas.
Me pasó en la licenciatura, tratando de interpretar cantidad de espectros de RNM y masas, que según yo eran -claritoclarito- compuestos con lantánidos coordinados a oxígenos. Y me pasó con dos sistemas. Resultó que no, pura descomposición catalizada por la acidez de Lewis y nada de resultados. Y así dos años, o más, creo. Hasta que un día me di cuenta que la ciencia -o lo que sea que esté haciendo ahora- se estudia desde el punto de vista de "no lo tengo, voy a demostrar que no lo tengo y que en este espectro hay cualquier otra cosa, pero no lo que inocente y optimísticamente pienso".
Le pasa ahora a mi jurado, que quiere que las tablas hablen y encuentren correlaciones que no existen, o que son rebuscadas y, a mi juicio y ocio, innecesarias. De todos modos me voy a acotar a lo que vale la pena discutir, con o sin apofenia.
La apofenia, que es, casualmente, el hallar correlaciones donde no las hay cuando la mente nos juega una mala pasada. Un caso de apofenia famoso es el iniciar la reproducción el Dark side of the moon (uno de mis discos favoritos que merece mención aparte) de forma simultánea a El mago de Oz (por ahí del tercer rugido, en la versión cernobilý). Entonces, según los fans, lo que se ve es una serie de coincidencias sorprendentes. Es un caso curioso y claro que se siente bonito estar ante tanta coincidencia.
Y claro que es un caso de apofenia. Y claro que uno puede go metaphysical y declarar que es o un logro espiritual del éter artístico o una de las muestras claras de que Dios sí existe, o de que al menos se apellidaba Waters/Gilmour/Mason/Wright (este último que en paz descanse).
Y de apofenia me voy a morir este fin de semana, baste de antecedente el espectro de RNM de 8 (figura en el encabezado), donde el protón mu-OH sale bailando entre una multitud de señales que sí parecen auténticas.
Apofenia pura.
